Satlantis, tras desarrollar una cámara de alta precisión para satélites, se dispone a abrir una etapa centrada en la prestación de servicios basados en los datos obtenidos por una constelación de tres microsatélites propios. Además, aspira a instalar una fábrica en Bizkaia de tales ingenios. Seed Capital Bizkaia se ha sumado a esta iniciativa.
El comienzo de Satlantis, iniciativa empresarial que mira al espacio, se remonta al año 2011, cuando, partiendo de las investigaciones y desarrollos realizados por Rafael Guzmán, director del Departamento de Astrofísica de la Universidad de Florida, se apuesta por realizar una traslación de la tecnología astrofísica al emergente sector de los pequeños satélites.
El proyecto es impulsado por un grupo de personas expertas en la materia provenientes del mundo de la ciencia, la innovación y la gestión empresarial que creen firmemente en las potencialidades del proyecto y en noviembre de 2014 constituyen la empresa en Bilbao; «fue mi única condición, que estuviera aquí«, señala Juan Tomás Hernani, CEO de Satlantis. “En Bilbao, además, tenemos a IDOM, la mejor ingeniería para la aventura optomecánica de espacio, y Bilbao es la cuna de Elecnor-Deimos, nuestro socio para la operación e integración de satélites”.
«Empezamos nuestro recorrido –precisa Hernani- con el objetivo de pasar del telescopio incial al desarrollo de microsatélites de monitorización, es decir, de observación en tiempo real de grandes infraestructuras o de áreas geográficas que tengan alto valor estratégico o económico y, a partir de éstos, en una fase posterior, a la prestación de servicios de geo-inteligencia y datos«.
Objetivos marcados
Satlantis, por tanto, se ha fijado una línea de posicionamiento en el mercado en fases sucesivas que contempla la evolución de sus desarrollos tecnológicos desde la oferta de soluciones para el sector espacial a la prestación de servicios de big data, y, en una siguiente etapa, a la fabricación en Bizkaia de constelaciones de microsatélites. Juan Tomás Hernani no oculta su entusiasmo: “este es un proyecto precioso y aspiramos a que llegue a ser importante también desde el punto de vista industrial, lo digo con toda la humildad; creo que, dentro de poco tiempo, tendremos aquí nuestra propia fábrica”.
Fases del proyecto
La primera fase del proyecto tecnológico de Satlantis se encuentra cerca de su finalización y ha consistido en la adaptación al sector de los satélites de la microcámara pensada por Rafael Guzmán para funciones astrofísicas. El prototipo, que ha superado con éxito las pruebas de resistencia realizadas por IDOM a las exigentes condiciones de los lanzamientos al espacio, ha despertado el interés de la Agencia Espacial Europea (ESA) así como de la NASA, lo que en último término permitiría comprobar su funcionamiento y capacidades en misiones reales.
La siguiente fase consiste en poder ofertar un producto final, directamente a los gobiernos con fines específicos, diseñados a medida, tanto de defensa como de control del medio ambiente, de las fronteras, del catastro…
Para crear su actual prototipo de microcámara, Satlantis ha realizado novedosos desarrollos tecnológicos que tiene patentados, que además de permitir reducir a una tercera parte el tamaño de las cámaras anteriores, generan, a través de un proceso de hiper-resolución, imágenes de un metro de pixel de resolución tomadas a 600 kilómetros de distancia desde el espacio. Utilizada en tierra, esta cámara podría llegar a hacer fotos de un centímetro de pixel de resolución.
Ronda de financiación
Todo este esfuerzo de innovación ha sido facilitado por el apoyo tanto de entidades públicas como BEAZ/DFB como por compañías privadas. Tras una primera participación en el proyecto de Seed Capital Bizkaia y otras entidades públicas, Satlantis se encuentra ahora a punto de cerrar una ronda de financiación en la que tomarán parte seis socios más: al respaldo de Seed Capital Bizkaia, Spri e ICO se sumará el de Telefonica e Idom, (firmas que, también con Elecnor-Deimos, ya han prestado una colaboración técnica clave a Satlantis), junto con el de un tercer socio privado. La búsqueda de tan amplio respaldo ha estado motivada, según explica Hernani, por el hecho de precisar trabajar con “muchísimas tecnologías” y la necesidad de “ir con socios potentes en UTE” para abordar “las ofertas millonarias que estamos haciendo”. “Debemos hablar por tanto, de la alianza SATLANTIS”.
Además de agradecer a los socios privados su implicación en el proyecto empresarial de Satlantis, su CEO también considera “de justicia” destacar la seriedad de las políticas de las instituciones vascas de apoyo a la innovación. “Aquí –señala- hemos experimentado que funciona el soporte institucional a la innovación; si no hubiésemos tenido en primera instancia el apoyo de la Diputación de Bizkaia y de la Spri, que posteriormente ha facilitado la entrada de grandes compañías, todo habría sido mucho más complicado”.
